domingo, 8 de noviembre de 2009

OBRERO Y ARTE A LIBERARTE

15 de NOVIEMBRE DE 1922 Y EL NACIMIENTO DE LA ESPERANZA

INTRODUCCIÓN:
Los procesos históricos que se enmarcan en la lógica de la lucha de clases tienen diversas formas de ser vistos, es decir, para la historia oficial hay cosas que nunca suceden y que las mandan al rincón del olvido, la historia de los vencedores niega toda posibilidad al vencido para hablar y contar su verdad.
La lucha que han emprendido históricamente los de abajo, los que están excluidos y son explotados por el sistema ha tenido como respuesta sistemática la violencia directa de los cuerpos represivos del Estado, el cual no es más que una máquina de dominación de una clase sobre otra, sin embargo, todas las masacres hechas en nombre del kapital no han logrado frenar el espíritu rebelde de los pueblos que resisten y atacan la arremetida violenta del sistema.
La lucha de miles de trabajadoras y trabajadores emprendida en Octubre y Noviembre de 1922 tiene distintos matices los cuales intentaremos ir desentrañando en este trabajo, para muchos autores el 15 de Noviembre de 1922 marca el bautizo sangriento de la clase obrera en nuestro país. Estas jornadas de lucha fueron el resultado de una serie de factores que incidieron en la precarización de las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras que participaron en este acontecimiento que nos enseña que el único movimiento que es derrotado no es aquel que es masacrado sino que aquel que sin pelear se rinde y se entrega a la voluntad de los dominantes.
CONTEXTO:
La coyuntura que desemboca en la matanza del 15 de Noviembre de 1922 comienza en el país con la época de los gobiernos llamados plutocráticos (1912-25), los cuales van consolidando un nuevo orden: el burgués y que van marcando la decadencia y el final de la Revolución Liberal.
La acción de estos gobiernos era la de realizar las modificaciones pertinentes para que una nueva clase dominante se afiance como tal y en este caso sería la burguesía comercial y mercantil en especial la guayaquileña que había contado históricamente con el capital suficiente para eso, sin embargo chocaba con los intereses de los terratenientes serranos, a los cuales desde el gobierno tenía que realizarle varias concesiones.
A pesar de esto la Revolución liberal va a marcar la pauta para la formación de organizaciones obreras sin control clerical. En este sentido se va dando la radicalización de un movimiento obrero naciente.
Otro factor que incide de manera directa es la agudización de la crisis económica que comienza en el mercado de New York con la baja del precio del cacao “el precio del cacao bajo de un máximum de 26 y tres cuartos centavos de dólar por libra en Marzo de 1920 a 12 centavos en diciembre de ese año, y a un mínimum de 5 y tres cuartos de centavo en 1921” (Cueva, 1988, pp. 24), este hecho incide de manera directa en las condiciones de vida de los trabajadores y las trabajadoras a los y las cuales se les rebajan los salario, porque el capitalista no va a disminuir su taza de ganancia, además los precios de los productos básicos se incrementaron especialmente de la harina que era importada, esta serie de factores van configurando el cansancio del pueblo, el cual se empieza a organizar en distintas centrales sindicales para emprender su lucha por una vida digna y sin explotación.
LOS ACONTECIMIENTOS:
La precarización de la masa trabajadora había llegado a niveles insoportables de explotación, por lo que los trabajadores ferroviarios de Durán se lanzan a una huelga a mediados de octubre, esto ya genero por parte del Estado cuyo presidente era José Luis Tamayo una primera movilización de tropas militares para defender los intereses del kapital extranjero, ya que la compañía de ferrocarriles estaba administrada por una empresa norteamericana llama “The Guayaquil y Quito Railways Co.”, los trabajadores demandaban prestaciones médicas y que se cumpliera con la disposición legal vigente desde 1920 de una jornada de trabajo de 8 horas.
La recién creada Federación de Trabajadores, Regional Ecuatoriana (FTRE) de inmediato se solidarizo al igual que la Sociedad Cosmopolita de Cacahueros “Tomás Briones” con los trabajadores en huelga, al día siguiente de la medida el gerente general de la compañía el señor Dobbie, da respuesta negativa a las peticiones y niega cualquier posibilidad de negociación argumentando que la empresa esta “actuando en absoluto acuerdo con el gobierno”, enseguida los trabajadores se desplegaron por la ciudad para explicar al resto de la población la situación en que se hallaban y el posible cumplimiento de la amenaza de ser despedidos por el abandono de su puesto de trabajo. Esta acción generó de inmediato la solidaridad del resto de la población que se veía reflejada en la situación precaria de estos trabajadores, el 26 de octubre se levantaba la huelga con victoria para los trabajadores.
Para el 7 de Noviembre en la ciudad de Guayaquil los obreros de la planta eléctrica y de los carros urbanos se declaraban en huelga con la demanda del incremento de salarios, la jornada de las 8 horas y e estabilidad laboral para todos.
La Confederación Obrera del Guayas asume la dirección del movimiento y se declara la huelga general el día 13 de Noviembre, las acciones callejeras se realizan por todo lado, de pronto Guayaquil se paraliza en todos los aspectos, ya para el día 15 se da una gigantesca movilización de diversos sectores populares que rebotan Guayaquil, en el silencio donde el poder decide las ordenes ya estaban dadas y el Jefe de la Zona Militar, general Enrique Barriga recibe un telegrama del presidente Tamayo, que decía lo siguiente “General Barriga. Espero que mañana a las seis de la tarde me informará usted que ha vuelto la tranquilidad a Guayaquil, cueste lo que cueste, para lo cual queda usted autorizado”, la sentencia estaba echada para el pueblo por el delito de morirse de hambre y luchar por sus derechos. Detrás de estas ordenes en la calle antes que la orden llegue a la tropa el diario el comercio reseña lo siguiente “una escolta de 50 hombres del batallón Marañon, en la calle Pedro Carbo es rodeada por el pueblo, que les dirige palabras fraternales. Cada soldado tiene alrededor 20 ó 30 hombres del pueblo. Les hablan como a antiguos conocidos. Preguntan si van a disparar. Abrazan a los soldados. Éstos prometen que protegerán al pueblo, si la policía los ataca”, de pronto esa promesa se olvida y los cuerpos policiales y militares se convierten en asesinos de ese pueblo al que juraron proteger.
Los obreros tratan de resistir como pueden con palos, piedras sin embargo una ola de balas los cubre, el dirigente sindical Alejo Capelo contabiliza hasta el momento 292 victimas pero ese número se incrementa a cada instante, los que escaparon a las balas lo hicieron en fugas huida. Oscar Efrén Reyes así narra esta parte de la historia “Las masa fueron rodeadas, y los soldados realizaron una espantosa carnicería en las calles, en las plazas y dentro de casas y almacenes”.
Los militares y policías arrastraban el cuerpo de los muertos por las calles en señal de victoria, con sus bayonetas les abrían el vientre para sacarles las viseras para que no floten en el río y se hundan, pensando hundir con su cuerpo también sus ideas, más sin embargo, no lo lograron y las ideas de luchar por la dignidad siguen presentes, la idea de la lucha contra el capital y la explotación se sigue demostrando con acciones, manifestaciones y cotidianamente para tratar de derrotar a este sistema criminal.
El 15 de Noviembre conmemoramos a los y las caídas y caídos en esta lucha y también renovamos el compromiso de luchar día a día por una sociedad más digna, igualitaria, justa y solidaria buscando la utopía de ser felices.

1 comentario:

  1. asi se hace compas siganadelante haciendo que cada vez sea mas grande y nutrida nuestra memoria y acabar con el capital
    saludos

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